Hoy se publica en el Diario Oficial el anteproyecto del reglamento de la categoría «envases y embalajes» de los productores prioritarios de la Ley de Reciclaje, ítem que es el más importante por su masividad y necesidad de cambio cultural que implica en la población, las empresas y municipios.
«El que contamina, paga» es el principal espíritu de la Ley de Responsabilidad Extendida del productor (REP) o Ley de Reciclaje que hoy cumple un hito clave: la publicación en el Diario Oficial del anteproyecto del decreto que establece las metas de recolección y valorización de la categoría «Envases y Embalajes». Este producto prioritario -de seis que incluye la legislación (los otros son aceites lubricantes, neumáticos, pilas, artículos electrónicos y baterías de vehículos)- es el que más mueve la aguja debido a su masividad. Por eso el gobierno, los productores, las municipalidades y los actores de los sistemas de reciclaje estaban esperando con tanta ansiedad el decreto.
Para llegar al documento se requirió de varios estudios y opiniones recogidas en un Comité Operativo Ampliado que elaboró el análisis de impacto económico y social (AGIES), donde la «responsabilidad extendida del productor aplicará a quienes pongan en el mercado nacional bienes de consumo envasados o embalados compuestos por al menos uno de los siguientes materiales: cartón para líquidos, metal, papel y cartón, plástico y vidrio», indica el texto. «Si no hubiésemos estado en la discusión, esta ley habría estado en las nubes. Todos ponían los ejemplos de otros países, pero nosotros logramos aterrizarlo a la realidad chilena», comenta Exequiel Estay, presidente de la Corporación Movimiento Nacional Recicladores Chile.
Además, el anteproyecto establece metas diferentes para los residuos domiciliarios y no domiciliaros, haciendo algunas excepciones, como con las microempresas.
Pero el corazón de la REP son las metas. Para el caso de los residuos domiciliarios, a partir de 2022, el 5% del cartón para bebidas debe ser revalorizado. Con respecto al metal, la cifra es de 6%; papel y cartón, 5%, plástico, 3% y vidrio, 11%. Este porcentaje va aumentando en el tiempo bajo el concepto de «gradualidad». Por ejemplo, en el caso de la subcategoría papel y cartón, se debe revalorizar el 70% hacia 2030, mientras que el plástico llegará al 45% en la misma fecha (ver gráfico). El caso de los productos no domiciliarios es diferente. En términos generales, deben comenzar con una meta de 30% en 2022, pero a partir de 2026 tendrán metas específicas para cada subcategoría.
«Nos hemos impuesto metas muy ambiciosas que nos permitirán acercarnos a las tasas de reciclaje de los países europeos. Esto, gracias a que, en gran parte del país, contaremos en los próximos años con la recolección puerta a puerta de los residuos reciclables que tenemos en nuestras casas». Comenta Carolina Schmidt, ministra del Medio Ambiente.
Cambio cultural
Por otro lado, la columna vertebral de esta metodología son los «sistemas de gestión», que permiten lograr que el envase que una familia lleva a un punto limpio cumpla la cadena de reciclaje o revalorización. Aquí entra una serie de actores como los recicladores de base, las municipalidades, los puntos limpios, los mismos productores y sistemas de fiscalización, entre otros. «Creemos que existe una gran oportunidad en la colectividad y colaboración que requiere un sistema de gestión para que funcione, ya que muchas veces la ciudadanía no tiene la capacidad de dimensionar toda la cadena, ya que sólo ve la basura cuando la pone en un punto limpio», comenta Macarena Guajardo, directora ejecutiva de Fundación Basura.
Guajardo se refiere al músculo de la REP: el cambio cultural de los ciudadanos. Si las personas no entienden que tienen que separar y reciclar su basura, este cuerpo sustentable podría enfermarse. «Todos podemos estar muy comprometidos, pero en las personas está la clave para asegurar que vamos a incorporar las materialidades al ciclo productivo», comenta Magdalena Balcells, gerenta general de la Asociación Gremial de Industriales del Plástico de Chile (Asipla), y agrega: «Esto es un cambio de paradigma muy grande a todo nivel: en los patrones de consumo, en la gestión y el reciclaje. No se ha hecho antes».
Otro cambio se dará en la forma en que se conciban los productos. «El ecodiseño es fundamental, porque para que un producto pueda reciclarse, tiene que estar diseñado para eso. No sólo los sistemas de gestión y la logística se tienen que acomodar. Sino que los productores tienen que adaptarse. Por eso la REP tendrá grandes efectos en el ecodiseño en Chile», comenta Verónica de la Cerda, CEO de TriCiclos. Podríamos ver por ejemplo, productos que se reutilicen más o cuya estructura sea más fácil de transportar. O incluso, innovaciones como la realizada por la empresa Bakey’s, en India, donde crearon cubiertos comestibles.
Pero aparte de las metas, sistemas de gestión y actores de este gran organismo, se necesita un médico que revise si la Ley REP está sana constantemente. Y ahí es donde entran varias obligaciones, donde una de las clave es informar. «Los productores, a través de un sistema de gestión, estarán obligados a entregar información respecto a la tarifa y de los productores que integran el respectivo sistema de gestión», dice el decreto. Al respecto, se deberá entregar un «informe de avance» a más tardar los 30 de septiembre (luego de la puesta en marcha) y un «informe final» los 31 de mayo del año siguiente.
Fuente: La Tercera
Daniel Fajardo Cabello. (2019). Ley REP obligará a las empresas a reciclar casi la mitad de los envases plásticos a 2030. 09/06/2019, de Diario La Tercera Sitio web: https://www.latercera.com/pulso/noticia/ley-rep-obligara-a-las-empresas-a-reciclar-casi-la-mitad-de-los-envases-plasticos-a-2030/691880/